miércoles, 3 de noviembre de 2010

Alguien dijo...

La sabiduría es hija de la experiencia

Suprema insensatez es la del hombre que escatima en el presente para no escatimar en el futuro, pues la vida se le va antes de que haya tenido tiempo de disfrutar de todas las buenas cosas que había adquirido con tantos trabajos



La Naturaleza se comporta con algunos animales más como cruel madastra que como madre; con otros, en cambio, es tierna madre en lugar de madastra

La necesidad es maestra y señora de la naturaleza


El espejo se vanagloria cuando contiene el reflejo de una reina, pero cuando ésta se va, vuelve a ser un vulgar espejo

La planta se lamenta del viejo palo seco que han colocado a su lado y de las viejas zarzas que la rodean. Pero el uno sirve para mantenerla erguida y las otras para protegerla de las malas compañías

4 comentarios:

Pedro J. Sabalete Gil dijo...

Muy buenas sentencias con verdades adheridas. Me gusta mucho la de la planta, la del espejo - esta es genial - y la de la necesidad.

Un abrazo.

Nuria dijo...

Según el libro que estoy leyendo, estas sentencias son de Leonardo da Vinci. El tío era genial

Mateo Bellido dijo...

la Naturaleza, que es tan vieja como el mundo, guarda toda la experiencia...De ella deberíamos aprender constantemente, en lugar de eso, no dejamos de herirla con nuestra inconsciencia.
Mi padre suele decir un refranillo..."Más sabe el diablo por viejo que por diablo".
Un abrazo

Sofía Campo Diví dijo...

Por algo se dice que la naturaleza es sabia.¡Qué pena que le hagamos tan poco caso!